Avanzando rápidamente para convertirse en una empresa de automóviles totalmente eléctricos, Volvo Cars está acercando el desarrollo y la producción de tecnología de celdas de batería a casa y tiene como objetivo adaptar sus futuras baterías a las necesidades del cliente: una mayor autonomía y tiempos de carga más rápidos.
Lo hará mejorando la tecnología de baterías de iones de litio en su próxima segunda generación de autos eléctricos, comenzando con el sucesor eléctrico puro del buque insignia XC90.
A mediados de la década, cuando presenta su tercera generación de automóviles eléctricos comenzando con el sucesor de su SUV mediano XC60 más vendido, Volvo Cars planea mejorar aún más la autonomía e integrar el paquete de baterías en el piso del automóvil, utilizando la estructura de la celda para la rigidez general del vehículo y la mejora de la eficiencia.
A corto plazo, Volvo Cars planea trabajar con la compañía de baterías líder en Suecia, Northvolt, para aumentar aún más la densidad de energía en sus celdas de batería hasta en un 50% en comparación con lo que está en el mercado hoy. A finales de esta década, Volvo Cars también busca romper el hito de densidad de energía de 1000 Wh / l, para lograr 1000 km de autonomía real.
Se espera que los tiempos de carga actuales se reduzcan casi a la mitad a mediados de la década, gracias a una mejor tecnología de batería y mejoras continuas en el software y la tecnología de carga rápida.
"Queremos aumentar constantemente los beneficios para el cliente, al conducir un automóvil Volvo totalmente eléctrico", dijo Henrik Green, director de tecnología. "Al simplificar el diseño y la integración de nuestras celdas de batería, podemos reducir el peso y maximizar el espacio, lo que permite mejoras considerables en la capacidad, el alcance y los tiempos de carga de la batería".
A medida que Volvo Cars avanza para convertirse en una empresa de automóviles totalmente eléctricos, la importancia de la sostenibilidad aumenta en paralelo. Si bien la compañía aumentará la energía de la batería en sus automóviles durante la próxima década, también trabajará para reducir continuamente su impacto de carbono.
Las celdas de batería de la colaboración planificada de Volvo Cars con Northvolt tienen como objetivo producirse utilizando energía 100% renovable, mientras que se está trabajando con otros proveedores de baterías para hacer lo mismo para 2025.
Volvo Cars tiene una estrategia clara para reducir aún más el impacto del carbono de las baterías haciendo un mejor uso del valioso material que contienen. Siempre que sea posible, se tiene la intención de Re manufacturar o reutilizar baterías y también está investigando en posibles aplicaciones de segunda vida, como el almacenamiento de energía.
Siempre que sea posible, las baterías que hayan llegado al final de su vida útil se reciclarán en recicladores autorizados que pueden ofrecer reciclaje de ciclo cerrado de materiales críticos para su uso en futuras baterías. La asociación planificada de Volvo Car Group con Northvolt también plantea la posibilidad de utilizar sus operaciones de reciclaje establecidas.
Volvo Cars también seguirá centrándose en el abastecimiento responsable de baterías, incluso mediante un uso más amplio de la tecnología blockchain. Al trabajar más de cerca con sus socios y proveedores, Volvo Cars fortalecerá aún más su abastecimiento responsable.
Ya con el sucesor de XC90, la compañía ofrecerá carga bidireccional, lo que permitirá a los clientes descargar el exceso de electricidad en la batería de su automóvil a la red eléctrica. Esto significa que los conductores de un Volvo eléctrico pueden proporcionar energía a la red cuando los precios y las emisiones de CO2 relacionadas con la producción de electricidad están en su punto máximo diario, mientras cargan su automóvil cuando las emisiones disminuyen.
“Queremos ofrecer a nuestros clientes coches totalmente eléctricos y sostenibles que les faciliten la vida y la disfruten más”, dijo Henrik Green, director de tecnología. “A través de la innovación inteligente y la colaboración con socios clave, podemos brindarles a los clientes lo que desean: más alcance, carga más rápida y costos más bajos y además impulsar aún más la adopción generalizada de la movilidad eléctrica”.
La hoja de ruta de electrificación de Volvo Cars se centra firmemente en la integración vertical, lo que implica el diseño, desarrollo, producción interna de baterías, motores eléctricos y software relevante en colaboración con socios estratégicos. El objetivo es lograr tantas sinergias y eficiencias como sea posible a lo largo de toda la cadena de suministro de baterías.
A principios de este mes, Volvo Car Group anunció una colaboración planificada con Northvolt para desarrollar y producir baterías sostenibles. Estas se adaptarán para impulsar la próxima generación de automóviles Volvo y Polestar eléctricos, y así garantizar un suministro futuro de baterías sostenibles necesarias para respaldar el crecimiento.
La colaboración con Northvolt es clave para la ambición de Volvo Cars de convertirse en líder en el segmento de automóviles eléctricos premium y vender solo vehículos eléctricos para 2030. También representa un paso importante en la expansión de sus capacidades internas de producción y desarrollo, junto con alianzas con líderes tecnológicos.
